20120630COHERENCIA
En ocasiones a muchos les ocurre que piensan una cosa y dicen y hacen la contraria. Está claro que así solo acumulamos tensiones y frustraciones. Coleccionamos incoherencias y sus consecuencias. Aquí hay que trabajarse la autoestima a la par que una buena gestión del pensamiento. Pero más allá de lo evidente también ocurre que las personas vivimos divididas entre dos ideas o valores y que sufrimos una contradicción interna en forma de sensaciones de incomodidad o tristeza. Es más sutil que lo anterior y la desconexión con nuestro propio cuerpo nos produce ese «quiero esto y quiero lo otro». O «siento una cosa y también la otra». «Quiero ir y quiero quedarme», te quiero y no te quiero», «tengo que cuidar de mama y quiero cuidar solo de mis necesidades» Trabajar sobre la intención positiva de una contradicción puede ser un buen momento para aprender a ser más coherente e inteligente emocionalmente.

Porque la sencillez y la verdad van de la mano, aprender a ser uno en nuestro interior no tiene precio.

Y tu ¿por cuántos te divides?

Sara Hernández Psicóloga Humanista